Policiales
02.09.2009 Critica
Dueño de local de comidas en La Tablada le destrozó el tórax y el abdomen con los pies a joven de 21 años que discutió con él porque no dejaba salir a su novia, empleada del asesino.
Salto mortal. Un joven de nacionalidad boliviana fue asesinado por un conciudadano de 48 años, que le destrozó el tórax y el abdomen cuando saltó reiteradamente sobre su torso hasta dejarlo sin vida. Ambos habían mantenido una discusión en un local de comidas de La Tablada, partido de La Matanza.La víctima fue identificada como Juan Carlos Urquizu Alegre, de 21 años, que vivía en Lomas de Zamora. El domingo pasado, el joven había ido hasta ese local -ubicado en la calle Nazar, a unas pocas cuadras de la avenida Crovara- a buscar a su novia Mónica, que era empleada del comercio. De acuerdo con lo indicado por los familiares de Urquizo Alegre, cuando ambos jóvenes se encontraron, comieron algo en el lugar y luego decidieron salir a dar un paseo. Sin embargo, justo cuando estaban por abandonar el comercio, el dueño del local se interpuso entre ellos prohibiéndoles que salieran. El hombre argumentó que aún no era el horario para que la chica se fuera a su casa.La joven, entonces, comenzó a discutir con su patrón. Urquizo Alegre intentó interceder entre ellos para evitar que continuara la discusión. Sin embargo, lo que logró fue el efecto contrario: su participación derivó en una pelea a golpes que terminó con su vida. De acuerdo con los testimonios de los testigos del hecho, el dueño del local se ensañó con el chico. En efecto, le pegó hasta cansarse y, cuando el joven quedó desmayado en el piso, saltó sobre su pecho hasta romperle literalmente el tórax. La lesión le ocasionó una grave hemorragia interna, que le provocó la muerte de forma instantánea, ante la mirada atenta de los presentes que no salían de su asombro ante una escena de tanta fiereza y violencia desencadenada por una simple discusión de horarios. En tanto, según lo indicado por uno de los familiares de la víctima a este medio, el chico había salido como todos los fines de semana. En esa oportunidad, había ido a buscar a su novia Mónica, de 24 años. “Juan Carlos era un chico de trabajo, que no le hacía mal a nadie y se encontró con este loco que lo mató así como si fuese un animal”, se quejó el tío de la víctima, llamado René, que aún no podía salir de su asombro e indignación ante la agresión sufrida por su sobrino. Interviene en el hecho, caratulado como Homicidio en Riña, la comisaría 13a. de La Tablada y la Fiscalía Nº 2 del Departamento judicial de La Matanza.
Salto mortal. Un joven de nacionalidad boliviana fue asesinado por un conciudadano de 48 años, que le destrozó el tórax y el abdomen cuando saltó reiteradamente sobre su torso hasta dejarlo sin vida. Ambos habían mantenido una discusión en un local de comidas de La Tablada, partido de La Matanza.La víctima fue identificada como Juan Carlos Urquizu Alegre, de 21 años, que vivía en Lomas de Zamora. El domingo pasado, el joven había ido hasta ese local -ubicado en la calle Nazar, a unas pocas cuadras de la avenida Crovara- a buscar a su novia Mónica, que era empleada del comercio. De acuerdo con lo indicado por los familiares de Urquizo Alegre, cuando ambos jóvenes se encontraron, comieron algo en el lugar y luego decidieron salir a dar un paseo. Sin embargo, justo cuando estaban por abandonar el comercio, el dueño del local se interpuso entre ellos prohibiéndoles que salieran. El hombre argumentó que aún no era el horario para que la chica se fuera a su casa.La joven, entonces, comenzó a discutir con su patrón. Urquizo Alegre intentó interceder entre ellos para evitar que continuara la discusión. Sin embargo, lo que logró fue el efecto contrario: su participación derivó en una pelea a golpes que terminó con su vida. De acuerdo con los testimonios de los testigos del hecho, el dueño del local se ensañó con el chico. En efecto, le pegó hasta cansarse y, cuando el joven quedó desmayado en el piso, saltó sobre su pecho hasta romperle literalmente el tórax. La lesión le ocasionó una grave hemorragia interna, que le provocó la muerte de forma instantánea, ante la mirada atenta de los presentes que no salían de su asombro ante una escena de tanta fiereza y violencia desencadenada por una simple discusión de horarios. En tanto, según lo indicado por uno de los familiares de la víctima a este medio, el chico había salido como todos los fines de semana. En esa oportunidad, había ido a buscar a su novia Mónica, de 24 años. “Juan Carlos era un chico de trabajo, que no le hacía mal a nadie y se encontró con este loco que lo mató así como si fuese un animal”, se quejó el tío de la víctima, llamado René, que aún no podía salir de su asombro e indignación ante la agresión sufrida por su sobrino. Interviene en el hecho, caratulado como Homicidio en Riña, la comisaría 13a. de La Tablada y la Fiscalía Nº 2 del Departamento judicial de La Matanza.
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