Todo comenzó a investigarse como un rumor en el medio de un reclamo de vecinos en Dock Sud. Diego Armando Jáuregui, de 16 años, ayudante de albañilería, está desaparecido desde el fin de semana pasado . La familia del chico hizo la denuncia el lunes último. Luego, tras la declaración de dos personas, fueron arrestados dos jóvenes (uno de ellos con antecedentes) que quedaron acusados de homicidio .
La sospecha de los investigadores sostiene que Diego fue atacado a golpes en una parrilla ubicada a media cuadra de su casa, en Campana y Debenedetti, de Dock Sud. El lugar, una despacho de comida a la calle, era regenteado por uno de los acusados. Siempre según fuentes del caso, el adolescente fue asesinado allí. Luego, el encargado llamó a un conocido para que lo ayudara a desaparecer el cuerpo.
El joven fue buscado toda esta semana por buzos de la Prefectura Naval y de la Policía Bonaerense en los arroyos Sarandí y Dominico, pero todavía no pudo ser hallado . Uno de las dudas en el caso es el motivo que llevó a cometer el presunto homicidio, ya que, según testimoniaron sus familiares, Diego no tenía ningún tipo de vínculo con los sospechosos .
El titular de la comisaría 3° de Avellaneda, Javier Villar, dijo a Clarín que en el marco de la investigación, en la parrilla se secuestraron algunas chapas y ropas, así como el auto que se usó presuntamente para trasladar el cadáver y arrojarlo al agua. Todos estos elementos incautados tenían manchas que fueron enviadas a laboratorio para verificar que se trate de sangre.
Los acusados, de 32 y 21 años, fueron arrestados durante la semana y se negaron a declarar ante la Justicia. El menor de los apresados estaba imputado por encubrimiento, pero luego quedó acusado de homicidio. El mayor, según dijeron a Clarín fuentes policiales, había cumplido una condena de seis años de prisión y había recuperado la libertad hace unos seis meses.
El vehículo, un Renault Clío, fue hallado en un taller mecánico de Sarandí, donde había sido llevado a reparar. Aunque para la Policía la intención era sacarlo de circulación por un tiempo. Los familiares aseguraron que tras la denuncia por la desaparición recibieron amenazas. Fuentes del caso indicaron que Diego había tenido algún problema con uno de los detenidos, pero que todavía no pudo precisarse el motivo. Interviene la Fiscalía 3 de Avellaneda,
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