28/01/11 Los ladrones actuaron a cara descubierta. Amenazaron a unos 30 clientes y empleados, controlaron al guardia y al policía de la garita y saquearon las cajas. Cuando escapaban, dejaron una falsa granada. Huyeron con 25.000 pesos, a metros del Alto Palermo
Con mucha tranquilidad, a cara descubierta y vestidos de pantalón y camisa , entraron al banco, amenazaron al policía de la Federal que estaba en la garita, a un vigilador privado y a unas 30 personas, entre empleados y clientes. Luego, en apenas tres minutos, escaparon con el dinero de las cuatro cajas de atención al público de la sucursal. Todo ocurrió en uno de las zonas más transitadas de la ciudad, sobre la avenida Santa Fe y a sólo una cuadra del shopping Alto Palermo.
El episodio ocurrió ayer minutos antes de las once de la mañana en la sucursal del Banco Supervielle de Santa Fe 3164 (y Coronel Díaz), en pleno Barrio Norte. La banda huyó con al menos 25.000 pesos.
Antes de escapar, los ladrones dejaron en la puerta de la sucursal una lata de gaseosa envuelta en cinta aisladora negra y con dos cables que sobresalían de la punta. El artefacto, que simulaba ser un explosivo , les permitió asegurarse de que nadie del banco los siguiera.
Según informó a la prensa Fabián Galli, el jefe de la comisaría 21° (que tiene jurisdicción en la zona), los asaltantes eran tres. Sin embargo los clientes que estaban en el banco en el momento del robo aseguran que los ladrones eran al menos cuatro .
Los asaltantes que entraron al banco estaban vestidos de pantalón y camisa y a cara descubierta. Según los testigos, tenían entre 30 o 40 años. Primero amenazaron al custodio de seguridad privada en el hall y al policía Federal del búnker, quien enseguida a ccionó la alarma .
“Entraron como clientes. Uno sacó una arma gigante. En mi vida había visto algo igual. A los clientes que estaban en la fila de caja los obligaron a tirarse al piso. A otros los hicieron sentar. Yo, como soy diabética, por los nervios me empecé a sentir mal. Entonces le pregunte a uno de los chorros si podía sentarme a comer un poco de azúcar y, con total tranquilidad, me respondió: ‘Sí, señora, vaya tranquila’ . A los clientes no nos tocaron”, explicó una jubilada luego del asalto.
Con la situación dominada, uno de los asaltantes cruzó la línea de las cuatro cajas de atención al público y amenazó a los empleados. “Esto es un asalto, saquen toda la plata y no se hagan lastimar”, gritó. Enseguida cargó el dinero en dos bolsos azules .
“Los ladrones actuaron con bastante tranquilidad, no tenían intenciones de lastimar a nadie y se fueron rápido. En un momento se sintió la voz de uno de los asaltantes, que preguntó: ‘¿Ya está?’. A los pocos segundos se fueron con dos hermosas bolsas azules . Todo a los once menos cuarto de la mañana en Santa Fe y Coronel Díaz”, subrayó, indignada, otra de las clientas del banco.
El comisario Galli descartó que la banda haya intentado acceder al tesoro. Aseguró que se secuestraron las filmaciones de las cámaras de seguridad y que se levantaron rastros para intentar identificar a los asaltantes. De todas formas, hasta anoche no había pistas sobre los asaltantes .
Galli informó que los patrulleros llegaron rápido a la puerta del banco, pero los ladrones se fueron en menos de tres minutos . Además, según el comisario, en la esquina del banco había un policía de la Federal de consigna y otro a 100 metros, aunque ninguno advirtió el asalto porque los ladrones entraron a la sucursal como si fueran clientes y recién adentro del hall sacaron sus armas.
Cuando los ladrones se fueron peritos en explosivos desarmaron la falsa granada que había dejado la banda de asaltantes en la puerta del banco. “Se está realizando un arqueo de cajas para determinar el monto exacto de los que robaron”, concluyó una fuente del caso.
viernes, 28 de enero de 2011
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