Un fiscal pidió la indagatoria de Bonafini

Ayer, ella volvió a criticar a la Corte; dijo que Lorenzetti "recibe dinero y sobres" y que los jueces "son mucho más que turros"
Viernes 1 de octubre de 2010

Paz Rodríguez Niell
LA NACION


Con una celeridad fuera de lo común, avanzó ayer en la Justicia una causa penal contra la presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, por haber exhortado a un grupo de manifestantes a "arrancarle a la Corte" el caso sobre la ley de medios y, si era necesario, "tomar el Palacio" de los Tribunales.

La denuncia fue radicada a primera hora por un abogado particular. Pocas horas más tarde, el fiscal Gerardo Di Masi presentó un escrito para impulsar la investigación y pidió que Bonafini fuera citada a indagatoria, acusada de los delitos de amenazas e incitación a la violencia. El juez Claudio Bonadio debe decidir ahora si la cita.

Indiferente a lo que pasaba en los Tribunales, la presidenta de Madres de Plaza de Mayo volvió a criticar ayer a la Corte. Antes, había llamado "turros" a los jueces, pero ayer dijo que eran "mucho más que turros".

A través de un comunicado, apuntó directo contra el presidente del tribunal, Ricardo Lorenzetti, a quien acusó, sin eufemismos, de recibir sobornos. Dijo además que si hay ministros honestos en la Corte, deben renunciar.

"No hay cosas limpias si Lorenzetti se reúne por atrás y recibe dinero y sobres y lo que sea, los demás también están envueltos en esto -afirmó-. Si hay gente honesta y proba y son buenos, como algunos que son casi nuestros amigos, que se vayan, que se vayan, que renuncien a la Corte, no se pueden quedar. Porque donde hay un tipo que comete delito todo lo demás queda sucio."

Sus declaraciones anteriores, realizadas desde el escenario de un acto multitudinario frente al Palacio de los Tribunales, motivaron cinco denuncias penales ante la justicia federal. Una de ellas fue la del abogado Denis Pitté Fletcher, la que investiga Bonadio. Lo que reclamaba Bonafini en aquel acto era que la Corte rechazara una medida cautelar que tiene en estudio y que demora la instrumentación de la ley de medios.

Según relata el fiscal del caso, el denunciante pidió investigar a Bonafini porque "luego de imputar a los integrantes de la Corte Suprema por recibir sobres con plata y calificarlos de turros, dijo: «No dejemos la calle. La calle es nuestra. Arranquémosle a la Corte el fallo. Si tenemos que tomar el Palacio, tomémoslo. Hay que arrancarle a la Corte lo que es del pueblo»".

Estos dichos son el objeto de la causa. Por eso, el fiscal Di Masi pidió que "se libre oficio a los medios televisivos, de aire y cable, a fin de solicitarles la remisión de los videos correspondientes al discurso de Hebe de Bonafini".

No obstante, nadie cuestiona que ella dijo lo que dijo. Por esa razón, junto con el pedido de los videos, Di Masi solicitó, sin dilaciones, la indagatoria de la presidenta de Madres de Plaza de Mayo.

La indagatoria es un acto de defensa del acusado, que debe ordenarse, según la ley, "cuando hubiere motivo bastante para sospechar que una persona ha participado en la comisión de un delito".

A Bonafini se le imputan "amenazas", figura que tiene prevista una pena de cinco a diez años de prisión, e "incitación a la violencia" (tres a seis años). En cuanto a los delitos, el fiscal fue aún más duro que el denunciante. Sostuvo que éstos no concurren ideal sino materialmente, lo que implica que, a su juicio, la pena por los hechos que se le adjudican a Bonafini podría ser de hasta 16 años de prisión.